La mejor guía nutricional sobre el queso

Somos muchas las personas amantes del queso, ¿pero sabemos qué contenido de grasa tienen?

Quienes me conozcáis sabréis que me podéis hacer feliz con dos cosas: queso y croquetas.

Por ello, hoy ha tocado el día de contaros un poquito más sobre el queso, para que sepáis elegir bien y sepáis qué es lo que estáis comiendo, ya que esto es el kit de la cuestión... Estar informados a la hora de consumir algo para saber elegir correctamente.

Es importante saber si todos los quesos son iguales (ya os digo de antemano que no), qué ingredientes deben de llevar y cuáles podemos consumir de forma diaria o de forma ocasional.

¿Qué es el queso y cuál es su valor nutricional?

La base del queso, como bien sabréis, es la leche. Esta puede ser de distinto origen: de vaca, cabra, oveja, búfala… Incluso hay culturas en las que encontramos quesos con leche de camella o de yegua.

A esta leche se le añade el cuajo, el cual hace que la leche coagule y se forme el bloque de queso. También se añaden fermentos que hacen que el queso, valga la redundancia, fermente.

Si este es el único proceso del queso, encontramos los quesos frescos. En cambio, si estos se dejan madurar en cámaras, hablaríamos de quesos madurados o curados.

El queso es una excelente fuente de proteínas de alta calidad, las cuales son más digeribles gracias al proceso de fermentación. Además contienen calcio, fósforo, zinc y vitaminas A, D y del complejo B.

Pero ojo, su contenido de grasa y sodio (sal) variará dependiendo del tipo de queso y de su proceso de elaboración. Esto hará que en un momento determinado nos decantemos por un queso u otro.

Generalmente, cuanto más curado y fuerte sea un queso, más grasa y sal tendrá.

Y para aquellos intolerantes a la lactosa, debo de daros un mensaje de tranquilidad: la mayor parte de ella desaparece con la fermentación, aunque pueden contener una pequeña cantidad residual. La técnica fácil para saber si la contiene, es mirando en la tabla nutricional el contenido en azúcares (lactosa).

Clasificación de los quesos en función de su contenido en grasa

Porque como os decía, aparte de mirar que los ingredientes sean los propios de un queso y que no lleven aditivos, debemos de fijarnos en su contenido de grasa. Esta será la que dicte si es un queso que podemos comer de forma diaria o bien de forma ocasional.

A continuación os presento una clasificación de los quesos según su contenido de grasa por cada 100g de producto.

Quesos menos grasos que podemos comer diariamente:

Tipo de quesoContenido en grasa
Queso fresco 0% (tipo Burgos)Menos del 1%
Queso cottageAlrededor del 5%
Queso fresco batidoAlrededor del 6%
Queso ricotaAlrededor del 10%
Queso fresco de cabraAlrededor del 13%
Queso fresco (tipo Burgos)Alrededor del 15%
Queso mozzarellaAlrededor del 16%
Queso havarti lightAlrededor del 17%

Quesos moderadamente grasos que podemos comer semanalmente:

Tipo de quesoContenido en grasa
Queso fetaAlrededor del 21%
Queso camembertAlrededor del 21%
Queso goudaAlrededor del 24%
Queso de cabra (rulo)Alrededor del 26%
Queso havartiAlrededor del 26%
Queso emmentalAlrededor del 27%
Queso cheddarAlrededor del 28%

Quesos con mayor contenido de grasa que podemos comer ocasionalmente:

Tipo de quesoContenido en grasa
Queso parmesanoAlrededor del 29%
Queso azulAlrededor del 29%
Queso brieAlrededor del 31%
Queso gruyereAlrededor del 32%
Queso tiernoAlrededor del 33%
Queso cheddarAlrededor del 34%
Queso semicuradoAlrededor del 35%
Queso mascarponeAlrededor del 36%
Queso curadoAlrededor del 40%
Queso de cabra curadoAlrededor del 40%

Además de esto, es importante evitar quesos tipo quesos de untar, quesos tipo “babybel”, cremas sabor a queso…

Así que sabiendo todo esto... ¡Venga a haceros una buena tablita de quesos!

https://es.e-noticies.cat/sociedad/soy-nutricionista-esto-debes-antes-comprar-queso