Soy nutricionista y te cuento por qué el zumo de frutas no es tan saludable como crees

Te explico qué diferencias hay entre beber un zumo de frutas y comer una fruta. Aunque lo parezca, no es lo mismo.

Posiblemente, si te preguntan si el zumo de fruta es saludable dirías que sí o, como mucho, que el natural sí que lo es. Pues bien, hoy vengo a contarte por qué esto no es del todo cierto.

Es algo que a menudo cuesta de entender… ¿Si es tan saludable la fruta, por qué no lo es un zumo de frutas? ¿Son malos solamente los zumos comerciales y los naturales podemos tomarlos sin problema? ¿Cuenta el zumo como una ración de fruta?

Las frutas, como ya sabemos, son un alimento más que saludable: aportan múltiples vitaminas y minerales, ayudan a la digestión, tienen pocas calorías, tienen gran contenido en agua, nos aportan antioxidantes.

En definitiva, es imprescindible incluirlas en nuestra dieta diaria, haciendo un consumo de 3 piezas diarias, tal y como recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS).

¿Qué se considera realmente zumo de frutas?

En el mercado hay diferentes productos que se venden como zumos, pero que realmente no lo son. Un zumo es la fruta exprimida y nada más. Se obtienen exprimiendo la fruta fresca en el punto adecuado de maduración y no lleva ningún aditivo. Por lo tanto, cabe pensar que es lo mismo un zumo casero que un zumo comercial.

Después, podemos encontrar también en el supermercado los zumos de fruta a partir de concentrado. En resumidas cuentas, lo que hacen es coger el zumo, retirarle el agua del propio jugo hasta ser un producto concentrado y posteriormente le vuelven a añadir el agua en el momento del envasado. De esta forma se bebe la esencia más pura de la fruta exprimida, sin pulpa.

Por último, están los néctares de frutas. Se trata de la opción más cuestionada, porque además del zumo, los fabricantes también le añaden o bien azúcar o algún tipo de edulcorante. De todas formas, tanto los zumos como los néctares tienen un problema común: la cantidad de azúcares que contienen.

Los azúcares, el principal problema del zumo de frutas

El principal problema de los zumos de frutas es su alto contenido en azúcares libres. Como sabemos, la fruta contiene azúcares naturalmente presentes, lo que llamamos fructosa. Y te preguntarás, ¿por qué es más problemático el zumo que la fruta en sí?

Pues bien, tienes que pensar que, cuando te preparas un vaso de zumo seguramente no estés usando únicamente una pieza de fruta, sino dos o tres. Esto hace que el azúcar presente en la fruta de forma natural se multiplique por dos o por tres.

Por otro lado, al exprimir la fruta se elimina el contenido de fibra, lo que da como resultado un mayor pico de azúcar en sangre. Es cierto que esta cantidad de fibra puede aumentar si le añadimos la pulpa, pero nunca será para nada lo mismo que una pieza de fruta.

Además, esta ausencia de fibra hará que el zumo no nos sacie nada, a diferencia de la pieza entera. En conclusión, debemos dejar el zumo de frutas para momentos puntuales, y priorizar siempre comer la pieza de fruta entera.